29/09/2023 - En Cars.com llevamos la nueva versión el Parque Nacional El Palmar, Entre Rios, para testear la nueva caja automática de 7 velocidades.
CLAUDIO CAPACE 9 March 2011
Esta versión está dirigida a las familias que buscan los atributos de la gama Tiida, pero que necesitan el espacio de carga de un auto con baúl. Perfil bajo y gran rendimiento son sus credenciales.
Desde hace un par de años, Nissan Argentina viene desarrollando una política comercial gracias a la cual comienza a ocupar de manera clara distintos lugares en el mercado. Dentro de ese diagrama paulatino pero sin denuedo, el Tiida ocupa un lugar preferencial, ya que se constituyó en el principal caballito de batalla de la filial local de la marca nipona… al menos hasta la reciente llegada del Sentra, que complementa y apuntala la presencia de este modelo en nuestro mercado. Y muy pronto el portfolio local de Nissan se consolidará con el arribo del pequeño March, un auto típicamente urbano del segmento B fabricado en México para toda la región y develado en San Pablo (ya que estamos, digamos que la versión que probamos para e-cars también llega desde la tierra de Pancho Villa).
Diseño
El Tiida sedán es un típico auto de tres volúmenes con baúl: salvo raras excepciones, los hatchback suelen ser más logrados, pero hay que reconocer que este modelo se las arregla bastante bien para mantener la elegancia en el remate del sector posterior. El baúl está claramente marcado y ofrece una buena capacidad de carga para ambiciones familiares: 467 litros. La distancia entre ejes llega a 2.600 mm, posee una longitud total de 4.470 mm y pesa 1.370 kg.
En el interior la presentación es sobria: se percibe claramente un habitáculo luminoso y espacioso, el techo solar aporta un plus interesante y el conductor encuentra rápidamente la mejor posición de manejo gracias a la regulación en altura de la butaca y la de profundidad y altura de la columna de dirección. Destacamos la correcta relación que se establece con todos los comandos (de accionamiento muy suave) en ese primer acercamiento casi intuitivo, el que se hace sin consultar el manual del propietario.
Frente al volante el panorama resulta agradable: buenos materiales -sin entrar en estridencias y sin alejarse de la sobriedad-, detalles mínimos en color metal y hasta cierta fragancia deportiva. La resolución del tablero, con tres esferas como acostumbra la marca, y el volante de tres rayos, contribuyen a lograr esa sensación. La lectura del tablero es clara, todo resulta bien legible y se combina info análoga con digital, ideal para tener todo a tiro de vista.
Equipamiento
Repasando el listado de confort y en relación con lo que propone el hábitat, este Tiida tiene todo lo que puede esperarse de un sedan del segmento C, y un poco más: a lo habitual suma algunos ítems interesantes como control de velocidad crucero, climatizador automático, tapizados de cuero, comando de audio a distancia, Bluetooth, asientos calefaccionados y un interesante equipo de audio que permite cargar seis discos auxiliares y reproducir MP3. Para los más sofisticados, esta versión agrega umbrales de puertas con detalles de aluminio personalizado. Las diferencias de equipamiento de confort y seguridad que suma este Tekna como tope de gama son el sensor de lluvia, el encendido automático de luces, los espejos exteriores retráctiles y las luces delanteras antiniebla.
Como ya es costumbre en la gama de la marca nipona, medalla, diploma y beso para la seguridad: a los cuatro airbags habituales de la familia suma dos laterales; sistema antibloqueo de frenos ABS (con distribución electrónica de la fuerza de frenado EBD y asistente de frenadas de emergencia BA), tres cinturones traseros de tres puntos y ganchos Isofix para las sillitas de los niños.
Pero no todo son loas, también encontramos cosas como para fruncir el ceño: a saber, la llave inteligente, cuya operatoria es bastante complicada y exige paciencia hasta develarla; y la ausencia de un control de estabilidad y tracción.
Motor y prestaciones
El motor de cuatro cilindros de 1.796 cc. es moderno y está bien resuelto: ofrece 124 CV, tiene 16 válvulas y brinda un andar muy relajado y suave, bien combinado con las relaciones de caja para sacar provecho de los 173 Nm de torque que se efectivizan a 4.800 rpm.
Metiéndonos de lleno en la performance consignamos que obtuvimos una velocidad máxima del orden de los 195 km/h y aceleramos de 0 a 100 km/h en 10,5 segundos. En fase de recuperación de velocidad, circulando en cuarta, necesitó 10 segundos para llegar de 80 a 120 km/h. Pero, por supuesto, no todo es acelerar: a la hora de frenar lo hace de manera eficiente y segura, muy estable y casi sin fatigas gracias a los cuatro frenos de disco.
En la medición de consumos este mediano se lleva una muy buena nota, lo que sin dudas tiene que ver la posibilidad de sumar una caja de seis velocidades que permite que el motor gire muy relajado a velocidades legales. El rendimiento registrado a 130 km/h fue de 12,5 kilómetros por cada litro de nafta súper (con una interesante autonomía, gracias a los 52 litros del tanque de combustible, que le permiten cubrir en estas condiciones más de 660 km de marcha). En la ciudad, llegó a desandar 9,3 km con un litro de combustible.
Sensaciones de manejo
El Tiida cuenta con dos ejes independientes (el de atrás en verdad es semi-rígido) que le otorgan un desempeño muy equilibrado, privilegiando el confort pero ofreciendo también una sensación de seguridad absoluta. Dinámicamente es agradable y la marcha logra reproducir el buen clima interior. Eso sí, hay que tener en cuenta que su ojo está puesto en las virtudes familiares: el que busque un sabor más deportivo deberá navegar por otros puertos.
Cuando queremos ir un poco más allá de lo que indican las buenas costumbres en virajes de media velocidad, tiende a inclinar un poco la carrocería pero va por donde manda el conductor. En la particular y poceada Buenos Aires sabe disimular y filtrar todo aquello que atente contra una marcha agregada sin chistar y con elogiosa sensación de solidez. Suma también, y mucho, la correcta insonorización.
Balance final
Para sintetizar un concepto general que lo defina después de conducirlo una semana podemos decir que es un auto de perfil bajo, bien construido y terminado con esmero para su categoría, que ofrece un andar sólido. La llamativa relación precio-producto-equipamiento se transforma en el principal argumento de compra.
El Tiida sedán tiene en nuestro mercado una respuesta comercial mucho más acotada que la del hatchback, pero los precios son exactamente los mismos que los de su hermano directo (un dato que no es nada menor dado que en un principio esta variante resultaba más costosa): la gama arranca con el Visia a U$S 20.002, sigue con el Acenta a U$S 22.423 y cierra este Tekna a U$S 25.000.
Por último, recordemos que el año pasado este mediano presentó un sutil restyling en la trompa y una nueva configuración de las distintas versiones, abriendo el abanico de opciones. Punto a favor para la garantía: 3 años o 100.000 km y una imagen de marca que se consolida año tras año y lo revalúa como usado.