El Subaru XV vio la luz en el pasado Salón de Ginebra con el nombre de Impreza XV, pero al igual que el Outback (que hace poco dejó de denominarse Legacy), cambió de nombre por decisión del representante de la firma japonesa en America Latina, que decidió incorporarlo al mercado local como un modelo totalmente nuevo. Todo esto forma parte de la estrategia de Indumotora, que busca afianzar la imagen de la marca en la región y duplicar las ventas que realizó en el año 2009.

La gama de este nuevo crossover presentada para Argentina está compuesta por tres modelos: arranca con el XV 2.0R AWD que tiene un costo de u$s 34.900 y cuenta entre su equipamiento con caja manual, ABS, control de tracción y estabilidad (VDC), seis airbags, llantas rodado 16, ganchos con tecnología Isofix, climatizador automático, radio con CD, MP3 y entrada auxiliar para Ipod, faros antiniebla, barras de techo, doble regulación de volante, butacas deportivas, alerón trasero, paragolpes y fenders laterales de neto corte off road. La versión 2.0R está provista de caja automática tiene las mismas virtudes y un valor de u$s 36.700. Para los amantes de los detalles, la opción ideal es el XV Limited, que está disponible por u$s 41.900 y agrega cargador de seis CD, asientos calefaccionados y tapizados de cuero.

La motorización es la misma que se presenta en el Subaru Impreza “civil”: el propulsor naftero Boxer (cilindros opuestos horizontales) de 2 litros que entrega 150 CV, la transmisión es de cinco marchas en la opción manual (con caja reductora) y de cuatro en la automática. En ambos casos, la tracción es permanente en las cuatro ruedas.

Una modificación que adoptó esta versión off road con respecto a la berlina de la que deriva es el aumento del despeje, que pasó de 150 a 185 milímetros: esto, sumado a un chasis balanceado y a las virtudes de la mecánica, le permite llegar a casi todas partes sin resignar funcionalidad y confort. Así, este nuevo modelo de Subaru entrega verdaderas prestaciones “todo terreno”, una buena relación costo-producto y una envidiable garantía de 5 años o 100.000 km.

Uno de sus pocos rivales directos en Argentina es el Seat Altea Freetrack, con algunos CV más (211) pero a un costo superior (u$s 45.000). Definitivamente, el Subaru XV se presenta como una buena opción en un mercado que se ha desarrollado a pasos agigantados y en el que algunos oponentes ofrecen más de lo que realmente dan.