La marca bávara actualiza el Serie 4 que estrenó generación en 2013. Son cambios sutiles que le sirven como para refrescar la imagen en las tres carrocerías: Coupé, Cabrio y Gran Coupé.

Los retoques en el exterior se detectan en los extremos. En la trompa tiene modificaciones en la parrilla, las ópticas que usan LEDS para todas las funciones. Atrás cambia el paragolpes. También hay nuevos juegos de llantas de aleación, además de dos nuevos colores de carrocería.

En el habitáculo, el cambio más importante está en el cuadro de instrumentos, que ahora como opcional puede contar con una pantalla con distintas opciones de visualización para diversas informaciones. Otros detalles que se aprecian son las nuevas molduras decorativas en panel y salidas de aire. Se pone al día también en materia de conectividad y agrega una base de carga inalámbrica.

La familia de motores se achica y quedan las versiones nafta de 184, 252 y 326 CV, y las diésel de 150, 190, 258 y 313 caballos, quedando afuera la 25d de 224 caballos.