La suma de tecnología parece ser uno de los caminos más elegidos por las marcas al momento de renovar un modelo. Sistemas para optimizar la seguridad activa, asistentes de manejo y mejoras en los motores. Bien, a todo esto apeló Ford al momento del restyiling del Fiesta que además recibió cambios visibles en la trompa. 

El compacto del óvalo que estrenará edición 2013 en el Salón de París en apenas unos días, luce una gran parrilla de forma trapezoidal con marcos y barras horizontales cromadas. Ese es el aspecto más destacable desde el punto de vista estético, junto con los retoques en el capó y los leds para las luces diurnas. 

En cuanto a la incorporación de tecnología son varias las novedades para tener en cuenta. El sistema “My Key” actúa como un asistente para que el manejo sea más seguro, evitando distracciones del conductor. Lo que hace es configurar la velocidad máxima y el volumen del equipo de audio en la memoria de la llave del usuario, además de impedir que se desconecten los asistentes electrónicos de conducción. Es toda una primicia para la categoría de los compactos. 

El Active City Stop puede frenar por completo el auto ante el riesgo de choque al detectar un obstáculo. Este dispositivo actúa sólo a bajas velocidades, por debajo de los 30 km/h. 

En lo que hace a los motores, este nuevo Fiesta incorpora a su gama un motor de tres cilindros y de 1 litro de cilindrada. Este propulsor de la familia Ecoboost –que ya utiliza un Focus en Europa- fue varias veces premiado, incluso como “Motor del Año” por su eficiente rendimiento. Con rangos de potencia de 80 y 120 caballos, este motor estará acompañado por los diesel ya conocidos de 69 y 95 caballos.