04/10/2022 - Probamos la versión tope de gama de la pick-up fabricada en Córdoba. Confort y estética renovada.
GABRIEL SILVEIRA 9 December 2011
Renault apuesta a renovar la imagen de su SUV, que ahora adopta un estilo más moderno, al tiempo que conserva todas las cualidades mecánicas, la calidad y el confort de marcha de su antecesor.
Cuando Renault inició su aventura entre los SUV, en 2007, lo hizo con una verdadera obra de la globalización: el Koleos utiliza ingeniería Nissan, reconocido fabricante de vehículos 4x4, es producido por su marca coreana Samsung Motors y “el rombo” intentó darle su identidad estética.
Cuatro años después, la figura de este modelo que se destaca por su confort de marcha, su nivel de equipamiento, una mecánica eficiente y buen espacio interior, se reformula para no perder la vigencia ni el atractivo.
Cambios estéticos
Su diseño era, probablemente, lo más cuestionable del Renault Koleos. En primer lugar, esto se debía a la nula experiencia de la marca en este tipo de vehículos (Renault ha tenido vehículos de tracción integral, pero tomando como base modelos de arquitectura distinta a las de un 4x4, como fueron los casos del Scénic y Kangoo). En segundo término hay que tener en cuenta que, cuando este vehículo hizo su aparición, la marca francesa estaba en un momento de transición estilística para su gama.
El cambio más notorio en el renovado Koleos se da en la trompa. Ahora lleva una parrilla grande, con barras horizontales cromadas y un rombo de mayores dimensiones. Los faros también han sido reformulados, junto con el capot y el paragolpes. Todo el conjunto cuenta con trazos rectos que terminan formando ángulos y le dan una figura muy distinta a las formas suaves y redondeadas del modelo anterior. El otro cambio apreciable en el exterior son los nuevos espejos retrovisores, que ahora llevan incorporadas las luces de giro.
Por dentro se mantiene el estilo en general, y los pocos cambios que hay son menores. El que se advierte primero es el del nuevo tablero de instrumentos, que incluye un display digital mejorado. La utilización de buenos materiales y una correcta terminación permanecen como uno de los puntos altos de este modelo. La posición de manejo es cómoda y se logra fácilmente y el espacio en las plazas traseras es bueno en ancho y altura, aunque el lugar para las piernas no es muy generoso.
El mismo corazón
El Koleos llega a nuestro país con una sola versión de motor: se trata de un naftero de cuatro cilindros y 2.5 litros de cilindrada que entrega 170 caballos de fuerza. La versión que probamos en Francia, antes de su lanzamiento en el mercado local, llevaba este propulsor asociado a la caja automática CVT (de relaciones continuamente variables).
Se trata de un conjunto que da muy buenos resultados: el propulsor es sereno y entrega la fuerza en forma progresiva. No tiene reacciones que sorprendan, pero su potencia le alcanza y sobra para mover agilidad al Koleos. Aunque también es cierto que se siente la ausencia de una respuesta más enérgica ante una aceleración grande cuando se viaja a ritmo, por ejemplo en un sobrepaso.
La caja automática es ideal para aumentar esa percepción de confort que ofrece el Koleos. Al ser una transmisión de relaciones continuamente variables, la sensación al acelerar es como estar acelerando un ciclomotor. En una búsqueda de velocidad media, por ejemplo, el cuenta vueltas se clava en las 3.000 rpm, pero las marchas “van pasando” aunque no se aprecie ningún salto. Si se desea circular fuera del asfalto, se puede optar en un uso manual de la caja: para ello el sistema establece seis marchas fijas.
Superando obstáculos
Al igual que el conjunto motor-caja, el sistema de tracción del Koleos es el mismo que lleva el Nissan X-Trail. Permite utilizarlo de manera automática –que distribuye la fuerza entre ambos ejes y sin injerencia del conductor– bloquear 50 % adelante y 50 % atrás o elegir que trabaje sólo el eje delantero.
Cuando tuvimos la oportunidad de probarlo en una pista off road de exigencia media, el Koleos superó cualquier tipo de obstáculos. Hay que decir que su mayor limitación se encuentra, como les sucede a casi todos los SUV que se venden hoy, en sus neumáticos, que son más aptos para el asfalto que para los terrenos difíciles.
Sensaciones de manejo
El confort de marcha sigue siendo uno de los puntos más altos del Koleos. El sistema de suspensión absorbe muy bien las irregularidades del camino y no se muestra como un vehículo “saltarín”, algo que agradecerán mucho los pasajeros de las plazas traseras. A pesar de ser un vehículo alto, no demuestra grandes balanceos de carrocería en curvas, y su buena insonorización es otro factor incrementa el confort al viajar.
La fórmula del nuevo Renault Koleos es renovar su imagen, que ahora está mejor lograda, pero al mismo tiempo mantener todas las virtudes mecánicas y de confort que le permitieron lograr una buena performance comercial en un terreno en el que la marca del rombo no tenía experiencia alguna: el de los SUV.