Chevrolet, apoya iniciativas de ahorro energético en universidades norteamericanas a través de su iniciativa de reducción de carbono voluntaria. Para ello, la marca ha contribuido con el desarrollo de una fórmula a partir de la cual, los campus universitarios pueden ganar dinero en la medida en que implementen mejoras que reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero.

Esta es la primera vez que los campus universitarios utilizan metodologías de performance de carbono para hacer dinero a través de la reducción en las emisiones de gases de efecto invernadero como resultado del ahorro de energía. Dado que, las emisiones de carbono, siguen contribuyendo al calentamiento de la tierra, dicho financiamiento permite a las universidades reducir su impacto y al mismo tiempo, ahorrar dinero, comprometiendo a la vez a todos los estudiantes en estos esfuerzos.

Con esta iniciativa, Chevrolet comprará y amortizará los créditos de carbono resultantes de las reducciones de gases de efecto invernadero ya sean, de sus edificios que cuentan con la certificación de Liderazgo en Diseño Energético y Ambiental (LEED, por sus siglas en inglés), como de otras iniciativas de ahorro energético en toda la extensión del campus.

Durante los últimos dos años, Chevrolet ha sido el mayor comprador corporativo norteamericano de créditos de carbono voluntario por volumen, de acuerdo con la organización sin fines de lucro Forest Trends Ecosystem Marketplace.

Los fondos de la compañía serán empleados para más readaptaciones de eficiencia energética en Valencia.  El proyecto piloto de Ball State, implica vender algunas de las reducciones de carbono de la instalación del mayor sistema geotérmico en una Universidad estadounidense.