El primer eslabón de los urbanos con aires de aventura fue el C4 Cactus, un original y simpático modelo que se presentó como prototipo en el Salón de Frankfurt de 2013 y que llegó al mercado europeo a comienzos de 2014 (+ info).

Este prototipo representa una visión superadora de Citroën en materia de SUV. Conocido por el momento como Aircross, este prototipo da una idea de cómo se vería un modelo con características de urbano con buenas aptitudes para bajar del asfalto. Es bastante más grande que el C4 Cactus. Mide 4,58 metros de largo por 2,1 m de ancho y 1,80 m de alto. Su estética está muy bien lograda ya que combina una cuota clásica de elegancia Citroën con una buena dosis de robustez. Es llamativo principalmente por su imponente trompa y las enormes llantas. La parrilla y las ópticas rasgadas recuerdan bastante al frontal del C4 Picasso. La estética off road se complementa con los plásticos en los pasos de rueda, en las puertas y en los bajos de trompa y cola, además de las barras de techo.

Las puertas traseras abren en sentido contrario a las delanteras, con lo cual queda garantizado un cómodo acceso al habitáculo futurista, decorado con detalles en tono naranja y dotado de grandes asientos. Ofrece espacio para cuatro pasajeros y tiene como elementos a destacar la abultada consola central, las dos pantallas multifunción de 12 pulgadas (una para el instrumental y otra para el multimedia) y el volante de formato achatado.

El concept fue desarrollado con un motor naftero 1.6 THP de 218 CV que se combina con uno eléctrico de 95 CV. Este segundo propulsor se alimenta de baterías de ión-litiose que, según Citroën, se recargan en 3 horas y media en una toma doméstica y ofrecen una autonomía de 50 km. Con una potencia de 313 CV, el vehículo requiere  4,5 segundos para de 0 a 100 km/h.

El Citroën Concept se presentará al público el 22 de este mes en el Salón de Shangai 2015.