04/10/2022 - Probamos la versión tope de gama de la pick-up fabricada en Córdoba. Confort y estética renovada.
3 February 2012
Subaru comienza a vender en Europa la nueva generación del XV, el SUV compacto derivado del Impreza. Con un estilo urbano, este modelo cuenta con la clásica tracción integral y motorizaciones boxer.
Crossover o SUV compacto, este vehículo nipón nació como una propuesta para el público que aprecia este tipo de productos por el estilo y la versatilidad, ya que es muy práctico para andar por la ciudad y con ciertas virtudes para un off-road liviano, tal como lo comprobamos cuando nos subimos a la primera generación que aún se vende en nuestro país. (VER NOTA: “Subaru XV, un oriental de ley”).
En abril del año pasado nos llegaban noticias desde Shanghai, cuando en el salón que se celebra en esa ciudad china, Subaru coqueteaba con un concept (VER NOTA: “Subaru XV Concept, un nuevo SUV urbano”) que anticipaba la llegada de esta generación, que fue estrenada en el Salón de Frankfurt y que lo encuentra renovado tanto en estética, como en equipamiento y también con alguna que otra novedad en la faz mecánica.
Basada en el concepto de “aventura urbana”, la marca se mete en la pelea por esta categoría en el mercado Europeo, donde hay rivales de temer como el con el Nissan Qashqai, el Hyundai ix35 (Tucson aquí), el Ford Kuga o el Mitsubishi ASX, entre otros.
Construido sobre la plataforma que también utilizará el próximo Impreza, este modelo ostenta 4,45 metros de largo, 1,78 de ancho y 1,57 de alto, con un notable despeje de 22 centímetros.
En la trompa se aprecia nuevas ópticas y una nueva parrilla, que en lugar de los dos listones cromados horizontales, ahora tiene uno solo y la franja cromada que le pasaba por encima para unir los faros ya no está. Sin embargo los cambios más notorios están atrás, donde presenta ópticas completamente nuevas que ya no invaden tanto el portón del baúl, un nuevo paragolpes y también la terminación de la luneta luce distinta. También es nuevo el dibujo de las llantas.
Por dentro se trabajó para mejorar la calidad percibida y para ello se reemplazaron algunos materiales y se afinaron ciertas terminaciones. Cambia el instrumental y la consola central que muestra un display superior (par la computadora de abordo) más grande y una pantalla de considerable tamaño para el navegador. También hay unos retoques en el volante que recibe nuevas teclas multifunción.
Mecánica y tracción
La gama de motores está integrada por dos nafteros y un diesel.
Entre los primeros están el nuevo 1.6 de 114 CV, asociado a un cambio manual de cinco velocidades y con reductora para los más “puristas” del 4x4; y el 2.0 con 150 CV asociado a una caja automática (CVT) o variación continua.
El diesel es el bóxer 2.0 de 150 caballos de potencia combinado con una transmisión manual de seis velocidades.
El sistema de tracción sigue siendo el tradicional Symetrical All-Wheel-Drive (AWD), que reparte de manera inteligente la fuerza a los ejes de acuerdo a la adherencia de las ruedas, un plus de seguridad, especialmente para cuando se viaja en ruta y con lluvia.
En el viejo continente se vende en cuatro versiones de equipamiento incluyendo de serie (desde la Advance) llantas de 17 pulgadas; computadora de a bordo; faros antiniebla y dirección asistida. Le sigue la Sport que agrega climatizador automático bizona; cruise control; Bluetooth; puerto USB; asientos calefaccionados y sensores de lluvia entre otros. La variante Executive suma navegador y faros de xenón, mientras que la Executive Plus, al tope de la gama, incluye techo eléctrico tapizado de cuero y sistema de arranque sin llave, entre otros.